20/03/2024

El capítulo de energía de la nueva Ley Ómnibus no varía respecto a la versión anterior, pero pone el foco en las grandes inversiones.

El Gobierno nacional quiere reflotar el proyecto que no logró consenso en el Congreso por lo que deberá acordar con las provincias. La buena noticia es que el capítulo de energía cuenta con el visto bueno de todos los actores de la industria.
La primera versión del nuevo proyecto mantiene el espíritu de la iniciativa que había logrado quórum en la Cámara baja: desregulación de mercado, libertad de precios, maximización de renta, eliminación de autoabastecimiento y del interés público – nacional, la limitación de prórrogas de concesiones y fomento a grandes inversiones.
“El capítulo de energía es muy parecido con todas las normas relativas a la regulación y libre fijación de precios en el mercado interno y el no requerimiento de autorización para importación y exportación. Esa matriz continúa. Lo mismo que la privatización de empresas públicas”, sostuvo Juan José Carbajales, en diálogo con el sitio Más Energía.
Para el especialista, la novedad del nuevo proyecto de Ley Ómnibus es que se autorizarán las exportaciones en firme de gas natural licuado por 30 años. “Es bastante parecido al proyecto de ley que logró media sanción en el Congreso durante la administración anterior”, consideró.
Una de las dudas que existía en el proyecto que cuenta con media sanción es si hacer un gasoducto especial por cada una de las plantas de licuefacción que tendrían las empresas o hacer uno entre todas las compañías para que abastezca a todas las terminales.
“Lo que se apunta es a tener un régimen que es general, que dice que podrá aplicarse a los siguientes sectores y ahí aparece hidrocarburos, minería y otros. Pero después va a quedar sujeto a la reglamentación, cómo va a ser al interior de cada sector. Ahí lo que hay es una serie de beneficios, extensiones fiscales e impositivos aduaneros, pero no hay definiciones sobre este campo en particular. El otro proyecto de ley tenía varias disposiciones, igual había incertidumbre, pero en este todavía no estamos hablando de GNL, sino en general de grandes inversiones en infraestructura”, analizó Carbajales.
El exsubsecretario de Hidrocarburos de la Nación también manifestó que, independientemente de que se apruebe la Ley Ómnibus, las compañías solicitarán un marco regulatorio para tener previsibilidad.
“Tal y como todas las leyes, después va a necesitar un decreto reglamentario. Ahí falta todavía la letra fina. Entiendo que va a ser un reclamo de las compañías para ahondar en la previsibilidad. Las famosas reglas claras y la seguridad jurídica. De la mano, por ejemplo, de una noticia que salió estos días, es que YPF y Petronas traspasaron a 2025 la fecha para la toma de la decisión final del proyecto, que iba a estar a fines de 2024 y se pasó a mediados de 2025”, aseveró el especialista.