20/11/2020
A través de un mecanismo de subasta pretende dar previsibilidad de precio para aumentar la producción y reducir importaciones.
El Gobierno oficializó el Plan de Promoción de la Producción del Gas Natural Argentino (plan Gas.Ar), un programa de subsidio a la producción de gas natural local que había sido anunciado en octubre pasado por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, en un acto en Vaca Muerta.
El objetivo del plan es incentivar el crecimiento de la producción de gas en los próximos años, junto con el estímulo a la producción. También impulsará la integración de las industrias Pyme con las cuencas, incorporando más valor agregado nacional y la creación de nuevos puestos de trabajo y la sustitución de importaciones. El método es el establecimiento de un precio sostén para la producción que garantice la viabilidad de las explotaciones.
Con este programa, el gobierno planea producir 30.000 millones de metros cúbicos de gas argentino en cuatro años; generar un ahorro fiscal de USD 2.500 millones y un ahorro en divisas de USD 9.200 millones, según cifras distribuidas por la Secretaría de Energía en un comunicado.
“Se inicia un proceso virtuoso de trabajo, inversión, producción, desarrollo regional y aumento del Valor Agregado Nacional. Comienza una etapa de sustitución de importaciones, ahorro de divisas, disminución del gasto público y mayores regalías para las provincias”, dijo el secretario de Energía Darío Martínez.
“Vamos a recuperar rápidamente el declino de producción el invierno que viene e incluso demandar menos importaciones de Gas Natural Licuado”, indicó.
El plan buscar incentivar al sector de gas convencional a producir asegurándole un precio por millón de BTU, a través de subastas con tope en USD 3,7 por millón de BTU. Actualmente, el gas que compran las usinas para generar electricidad se encuentra algo por arriba de los USD 2 el millón de BTU, insuficiente para estimular la producción.
Según información de la Secretaría de Energía, con la aplicación del plan Gas.Ar el Gobierno prevé la sustitución de importaciones de 30.804 millones de m3, generando un ahorro de divisas por unos USD 9.274 millones y un ahorro fiscal de USD 2.574 millones hasta 2024. Además, de un incremento en la recaudación fiscal a nivel nacional, provincial y municipal de USD 3.486 millones de dólares. Paralelamente, aseguran que el régimen generará miles de puestos de trabajo para operar equipos de perforación y sets de fractura y dinamizará la actividad de pymes y empresas de servicios vinculadas al sector, ya que “el programa incentiva la inversión y la producción de gas para satisfacer la demanda interna con gas argentino; potencia la generación de empleo y el desarrollo en las regiones productoras, tanto de sus Pymes y empresas regionales como del resto de la industria y la tecnología nacional; y garantiza los puestos de trabajo en la cadena de producción, promoviendo el desarrollo agregado nacional en la cadena de valor de toda la industria gasífera”.
Uno de los objetivos que espera alcanzar el Gobierno con el Gas.Ar, es mejorar la balanza comercial energética, al sustituir importaciones de Gas Natural Licuado (GNL) y el consumo de combustibles líquidos, y generar certidumbre de largo plazo en los sectores de producción y distribución.
Para el secretario de Energía, el esquema “da previsibilidad de precio y plazo contractual a los productores, normalizando un mercado de gas que en los últimos años presentaba severas distorsiones, para satisfacer en forma eficiente la demanda de todos los segmentos” al tiempo que “permite armonizar la situación entre el precio necesario que fomenta inversiones con la tarifa que puede afrontar el usuario residencial”.